miércoles, 24 de junio de 2009

¿Quién soy yo?

24 de Junio de 2009. Hoy se cumplen 2 meses desde que nació la iniciativa de incursionar en el mundo blogger, de aprovechar mejor mi tiempo libre virtual, y de crear un pequeño espacio para Dios como este. Han sido dos meses en los cuales no sólo me he matado el coco tratando de pensar en qué voy a escribir, y si es productivo para la gran masa creciente de lectores que visitan este blog, sino que han sido dos meses en los cuales he visto de cerca el respaldo de Dios en lo que hago y emprendo (incluso en este rinconcito). La idea de crear "La Mano de Dios" nació en un tiempo muy especial para mi, ya que tomé una decisión que definió un cambio en la trayectoria de mi vida, y de eso se trata la vaina, de cambiar y renovar la mente constantemente, haciéndola cada vez más parecida a la de nuestro padre. Esa decisión tuvo que ver con un acercamiento como nunca antes había ocurrido en mi vida con Dios, somentiendome a él como mi autoridad suprema, reconociéndolo y respetándolo como mi padre supremo, y amándolo y adorándolo como mi amigo supremo. Pero lo más bonito del asunto, es ver cómo Dios aprovecha ese papayazo que le das de acercarse, y lo hace de una manera muy cálida, se toma confianza, te habla, te consiente, y se preocupa por ti a tal punto que se vuelve perfeccionista con las cosas en las cuales te quiere bendecir. Muchas veces, cuando tomas este tipo de decisiones y experimentas ese tipo de cambios, surgen preguntas como "¿porque habiendo tanta gente en este mundo, Dios se empecina de esa manera con mi vida?", "¿quién soy yo o qué he hecho mejor que los demás para merecer semejante trato preferencial?". Bueno, como serenata de los dos meses del sitio, quiero mostrarte a continuación una muy buena respuesta a esas preguntas, de parte de un grupo llamado Casting Crowns. Querido lector, me resta decirte, que Dios te bendiga, que puedas gozar y experimentar esa maravillosa sensación de tenerlo muy cerca, y que te sometas a él lleno de gozo, para así gozar plenamente de sus bendiciones, y sobre todo, de su felicidad.



P.D.: Hoy 24 de junio, quiero decirte Mónica, que no importa lo que suceda, no importa lo que pase, recuerda siempre quién eres, tal como lo dice Casting Crowns. Este post va dedicado a ti, ya que tu me mostraste primero quién soy yo ;)

martes, 16 de junio de 2009

Por fin: ¡Cristiano llegó al Real Madrid!

Ha sido noticia en todos los periódicos y páginas de internet del mundo, y como este es un blog en parte futbolero, pues no podía ser la excepción. Si señores, al Real Madrid, que es uno de mis tres equipos del alma (junto con River Plate y... adivinen cual) llegó la semana pasada un jugador fuera de serie, excelente dentro y fuera de las canchas, y alguien que puede aportar mucho no sólo a su equipo, sino también a sus seguidores en el campo profesional, deportivo y personal. Ahhh, también llegó otro jugador importante, rompió el record de valor de transferencia, fue tasado en 94 millones de euros y también es un monstruo, pero sólo dentro de la cancha, y es Cristiano Ronaldo.

Pero el primero, al que de verdad quiero hacer referencia, es el que interesa, es el que no tiene casi detractores, el que es un verdadero ejemplo para la juventud y sus compañeros en el gremio futbolístico. Señoras y señores, del personaje que hablo es de Kaká, el mediapunta que jugaba en el A. C. Milan. A continuación voy a hacer una "breve" reseña acerca de este astro del soccer.

Ricardo Izecson Dos Santos Leite, más conocido como Kaká, nació en Brasilia, capital de Brasil, el 22 de abril de 1982. Su sobrenombre nació por culpa de su hermanito pequeño, que no podía pronunciar bien su nombre, así que le balbuceaba "caca". Luego, el empresario que lo representaba le aconsejó que cambiara su apodo por Kaká, ya que "sería más comercial" (yo sinceramente creo mas bien que el hombre vio que sonaba mucho mejor con el acento en la última sílaba, ya que sin él se prestaba para malentendidos. Si así nomás salen con el chiste pendejo de: "Brasil nos va a volver Kaká"). A diferencia de muchos futbolistas brasileños, que ven este deporte como la única opción de salir de la pobreza, el buen Ricardo viene de una familia bien acomodada de Brasilia, y gracias a Dios que se le dio por jugar fútbol, ya que lo hizo simplemente porque le gustaba (y le gusta). Cuando tenía 19 años, conoció a la que hoy es su esposa, Caroline Celico, que tenía 15 años. Luego, en el 2002 Kaká ganó el mundial de fútbol en Japón con la selección de Brasil, y vaya premio que le esperaba en su tierra natal, pues luego de su victoria, se hizo novio de Caroline. Lo destacable de su vida, es su comportamiento, que también es muy diferente al comportamiento de todo jugador brasileño que pisa Milán (y Madrid, y Barcelona, y Londres, y París, y Berlín, y Roma...) ya que Kaká NUNCA se ha visto envuelto en chismes, ni en problemas sociales, ni en bebetas, ni en estado de embriaguez, ni en escandalos. Algo que ha forjado muy bien su caracter y su comportamiento, es que desde muy joven Kaká forma parte del rebaño del Dios. Si señores, y aunque esto no es secreto para muchos, Kaká es cristiano, ¡y a mucha honra carajo! Pertenece a la iglesia brasileña Renacer, a la cual hace generosas ofrendas anuales (que de buenas, tener a Kaká dentro de su equipo). Su vida ministerial es ejemplar también, puesto que el muchacho nos resultó disciplinado, lee la biblia a diario, y cuando termine su carrera como futbolista, le gustaría ser pastor, según lo dijo en una entrevista a un medio italiano. Acostumbra mucho poner sobre sus camerinos y en las habitaciones de los hoteles donde se hospeda, salmos y adhesivos con una frase que dice: "Dios es fiel".

Su historia con Caroline es una verdadera muestra de fidelidad a Dios y a sus sueños, puesto que Kaká llegó virgen al matrimonio. Cuando ellos se "cuadraron", Kaká fue transferido de su club Sao Paulo, al Milán mientras apenas llevaban un año de noviazgo, y pues, Caroline era muy "pelaita" para irse a vivir a Italia con Kaká, así que cada uno vivió por su lado. En este caso, amor de lejos no fue amor de pendejos, puesto que los dos años que duraron separados, lo vieron como una prueba para su amor. Eso sí, hicieron un pacto de que cada uno podía salir con sus amigos (como no hacerlo, no se podían aburrir cada uno solo por su lado) pero, a la media noche por mucho, debían estar muy juiciositos llamándose desde sus respectivas casas. Kaká ha manifestado abiertamente su convicción religiosa, y también el hecho de que logró llegar virgen al matrimonio, aun cuando se presentaron muchas tentaciones (con Caroline únicamente, el hombre no miraba para otros lados).

De sus logros deportivos se conocen de sobra que fue balón de oro, que ha sido galardonado como mejor jugador del mundo, que ha sido yo no se cuantas veces campeón con Milan, que fue campeón mundial, pero lo que quiero resaltar, es que cuando Kaká ganó la primera Champions League con Milan, en 2007, no le importó estar enfrente de 80.000 espectadores, ni ver como sus compañeros de equipo se revolcaban epilépticos sobre el césped, sino que, mientras salía la lluvia de confeti y todos se abrazaban festejando, Kaká se apartó a un lado, se arrodilló, y se puso a orar, agradeciendo al que verdaderamente hizo todo posible, y al que lo puso en ese lugar, ya que de pequeño, y por una caida en una piscina, se fregó una vértebra, y su vida futbolística por poco se va al retrete. Le agradeció a Dios, con una camiseta que decía: "I belong to Jesus", traducido: "Yo pertenezco a Jesús". Y es que mientras la mayoría de los jugadores se preocupa en cómo va a celebrar los goles (mientras más ridícula sea la coreografía mejor, y eso nos pasa a todos, porque aunque yo casi no los hago en mis "cotejitos", es muy divertido celebrarlos chistoso), Kaká cuando "rompe el celofán" simplemente levanta los índices al cielo agradeciendo siempre a Dios. Obviamente, Kaká forma parte de la organización brasileña "Atletas de Cristo". Tres meses despues de haber ganado esa Champions League, la FIFA prohibió todo tipo de frases políticas y religiosas en las camisetas de los jugadores, así que no hemos vuelto a verlo con algo similar:


En lo personal, Kaká es una persona culta, le gusta mucho leer, ir a cine, y lo relacionado con el arte, mejor dicho, nada que ver con muchos de sus colegas brasileños, los cuales son vistos siempre sacados a patadas de los bares por los gariteros o tenderos de turno, o aburriendo a los policías locales gracias a las llamadas de los vecinos a las 3 am, quejándose por las farras que los "cariocas" arman en los conjuntos residenciales. Y bueno, desde aquí, este humilde rinconcito, le deseamos los mejores éxitos a Kaká, y que siga siendo un muy buen ejemplo para los que estan dentro de la cancha, y para los que estamos fuera, ya que él es una muestra de que con el duro de arriba todo es posible. Dios puede gloriarse, y podemos alabarlo de muchísimas formas, si somos excelentes en lo que nos desempeñemos. Ahhhh, también le deseamos los mejores éxitos a Cristiano Ronaldo, que contribuya a que el Madrid gane todo y que en especial sea muy bien influenciado por Kaká, ya que ejemplos como él son los que necesitamos por montones en todas las áreas (Estoy seguro que Ronaldo es un asiduo seguidor de este espacio (?), así que, ¡¡¡sigue mi consejo viejo!!!).

P.D.: Con esa dupla en el Real Madrid, me imagino que de ahora en adelante los del Bernabeú van a incrementar su afluencia femenina de público, pero es que si venían de ver con la camiseta merengue a Diarrá, Robinho, "Pollo Mojado" Guti, Robben, Sergio Ramos, Pepe, entre otros, es comprensible que se interesen más en este momento por los ya vistos Casillas y Raúl, acompañados por C. Ronaldo y Kaká, ¡y esperen a que llegue Ribery!

"Estuviste brillante en el Bayern, y tu cara..."

(Valga la aclaración, mis comentarios acerca del físico de los jugadores es porque mis amigas mujeres me lo comunican, yo sólo veo en ellos la forma de jugar)

lunes, 1 de junio de 2009

El D.T. que necesita Millonarios...

Para comenzar esta temporada de vacaciones, quiero hacer una breve reseña acerca de una película, muy recomendada por este humilde servidor. El título original es "Facing the Giants", el cual lo podemos conseguir en español como "Enfrentando gigantes", y en la versión pirata como "gigantes hacia la victoria" o lo que se les ocurra a los brillantes contrabandistas. Excelente historia que puede ser compartida con toda la familia, puesto que trae un mensaje de esperanza y fé para el que la observe, además que trata de un tema que nos apasiona a casi todos, y es el deporte. Así como se ha mencionado en temas anteriores, podemos ver que Dios es un verraco para involucrarse y gloriarse en todo lo que el hombre emprenda, así sean cosas netamente lúdicas como el fútbol (En el caso de la película, el football).

La película relata la historia de Grant Taylor, entrenador del equipo de football de una escuela cristiana. Aun con un proceso (tan mentado y trillado entre los equipos de fútbol profesional de Bogotá) de tiempo atrás, Grant no ha conseguido más victorias que Juan Pablo Montoya en la Nascar (?), razón por la cual se está contemplando la posibilidad de reemplazarlo como técnico, no sin antes expulsarlo de una sutil patada en el "derriere". Ahora, la historia no sólo acaba ahí, puesto que Grant está pasando por uno de los momentos más complicados de su vida, mejor dicho, como dirían por ahí vulgarmente: "Cagao, y con el agua lejos", puesto que todo le está saliendo al revés. Pero, una simple decisión hace que las cosas comiencen a revertirse a su favor, y de la mano de Dios, vamos a ver que el football a la larga era un campo secundario en la vida de él y de sus jugadores, puesto que si se tiene fé, obediencia, y sujeción a la palabra, todas nuestras áreas van mejorando.

A continuación les muestro el trailer oficial de la película, me perdonarán mis seguidores de habla hispana, pero quiero enganchar también al público anglo, así que sólo muestro la versión en inglés, además, quiero incentivar el estudio de dicha lengua...




Jejejeje, la verdad es que no encontré un trailer subtitulado o doblado, así que, para el que no sepa inglés, les dejo la tarea de que lo encuentren.